Bartolo, el chilindrín (delfín) que encandila al puerto de Celeiro
Estimados amigos. Esta semana, y por segunda vez, dedico la historia a mi hermana Zaida (y a mi amigo Carlos que ayer estuvo de 43º cumpleaños), amante de los animales, y que hace unos meses me solicitó que escribiera una historia que tuviera un protagonista animal. Como a Zaida no le convenció el triste final de la ballena, dentro de la cual sobrevivió el amigo James Bartley, espero que esta semana le guste más la historia de Bartolo, el delfín vecino del puerto de Celeiro. Y os prometo que esta vez será una historia corta, para no recibir vuestras críticas.
Desde principios del verano de 2013 existe un delfín que tiene encandilado a todos los habitantes del puerto de Celeiro (Viveiro-Lugo) cada vez que aparece. Y debido a que según avanza el tiempo, cada vez lo hace con más asiduidad, ya se ha bautizado con numerosos nombres. Entre los más escuchados se podrían destacar los de Bartolo, Paquito, Golfiños y Chilindrín. También existen varias historias sobre su origen, pero debido a sus pocos fundamentos, todas ellas se podrían considerar inconsistentes. El caso es que el animal ha convertido a la ría de Viveiro en su hogar desde hace cerca de dos años y cada vez se deja más ver jugando con las boyas, acompañando a las lanchas y a los remeros o dando saltos y brincos. Gracias a ello despierta el interés de todo el pueblo, que lo está convirtiendo en su mascota más especial.
Este verano tuve ocasión de verlo, o eso creo, cuando me encontraba con mis hijos tomando una exquisita “1906” con unos cacahuetes en el Rolindes, a pie de playa, y mirando hacia la mar. La verdad es que aquel día ya anochecía y nada daba brincos, por lo que a mí me quedó la duda de si lo que vi era Bartolo, o simplemente una boya, pero bueno, de ilusión también se vive. En cualquier caso, mis hijos dicen que sí lo vieron ese día (aunque cualquiera se fía).
Hace unos meses, un alemán afincado en Covas, Patrick Markus, logró fotografiarlo en pleno salto. Este delfín habita el puerto de Celeiro desde hace casi dos años con un alto grado de sociabilidad con buceadores y marineros. Aunque dicen que se trata de un animal salvaje (eso dicen), permanece en esta zona de una manera confortable y aparentemente familiar. Parece ser que a los de su especie les gusta vivir en grupo y moverse continuamente en la búsqueda de alimento, pero este es un golfiño distinto. En las aguas de la ría de Viveiro parece que ha encontrado su hábitat adecuado. En condiciones normales pescan y nadan en grupo, y se adentran en puertos o en rías para conseguir alimentos de manera más fácil. Y desgraciadamente en algunos casos acaban muriendo.
Para los buceadores y nadadores de la zona del centro de actividades subacuáticas, Bartolo ya es un compañero más de viaje. Hace unos meses destacaron que hubo un domingo en el que el delfín les acompañó desde la punta del espigón de Granero hasta el punto de inmersión cerca de la isla que hay frente a la playa de “Area”. Y cuando acabaron les estaba esperando para el viaje de vuelta hasta el puerto de Celeiro.
Los buceadores dicen que la presencia habitual de Golfiños es un síntoma de la riqueza natural y del buen estado de conservación de las aguas de la Mariña. Dicen que hay gente que tiene que irse muy lejos, para previo pago y con animales adiestrados, poder tener la oportunidad de conocer lo que ellos pueden hacer de forma gratuita. Les sorprende que un ejemplar salvaje se deje querer al pie de la casa. La experiencia que relata el celeirés Jacobo Palmeiro Chao es sencillamente idílica, ya que consiguió en dos ocasiones nadar junto con el golfiño que desde hace casi dos años habita en la ría de Viveiro.
Para finalizar, y aunque os recomiendo la increíble experiencia de visitar Celeiro, os voy a dar la oportunidad de conocer a Bartolo y la zona, en vivo, gracias a Javier Fajardo, que viajó con Bartolo entre el espigón del muelle de Celeiro y las rocas de Os Castelos.
Javier subió este impresionante vídeo a youtube.
¡Hasta pronto, en una o dos semanas tendremos otra de piratas!