Un Ingeniero Naval y Oceánico en la IMOCA Ocean Masters
Buenos días. La noticia de esta semana se la dedico a David Moreno Royan, un Ingeniero Naval y Oceánico formado en Ferrol, que es el protagonista en esta ocasión. Y antes de que os preguntéis qué es esto del Imoca, os adelanto que en 2014 David fue nombrado por parte de la Real Federación Española de Vela (RFEV) y de la OSM (OPEN SPORTS MANAGEMENT), miembro del comité internacional de medición, para participar en la regata IMOCA Ocean Masters New York to Barcelona, al ser considerado uno de los expertos más preparados que posee Galicia y España en la actualidad en este tema.
Fundada en 1991 y reconocida por la ISAF (Federación Internacional de Vela) desde 1998, la IMOCA es la asociación de la clase que rige los monocascos Open de 60 pies (18,28 metros). Con más de treinta patrones miembros, su Campeonato incluye dos regatas de vuelta al mundo, una regata de vuelta a Europa y diversas regatas transoceánicas. La Clase IMOCA contribuye a la internacionalización de las regatas de altura y aplica en su día a día los conceptos de competición, innovación, aventura humana y seguridad.
La Transat (de transatlántica) a dos “New York – Barcelona” fue la única regata del verano pasado de la clase IMOCA. Su salida tuvo lugar frente a la Marina de North Cove el domingo 1 de junio y las tripulaciones pasaron junto a la Estatua de la Libertad antes de salir del puerto de Nueva York.
El recorrido de 3.700 millas constó de la travesía del Atlántico Norte hasta el estrecho de Gibraltar y 525 millas muy tácticas en el Mediterráneo, a lo largo de las costas españolas, hasta la llegada en Barcelona.
David Moreno Royan, Ingeniero Naval y Oceánico formado en Ferrol, por cierto, amigo y persona de trato muy agradable, estuvo realizando a lo largo del pasado mes de mayo de 2014, los trabajos de supervisión y control del correcto funcionamiento de los equipos de comunicación y seguridad de a bordo de los IMOCAS. Para ello se desplazó a New Port (Rhode Island, USA), donde la OSM centró la base de las embarcaciones participantes para comenzar los controles de seguridad y de comunicaciones pertinentes.
Después la flota al completo se desplazó al puerto de salida de New York para terminar dichos controles, de donde el día 1 de junio partió la regata. Cabe destacar que David ha recibido formación específica en Francia y España sobre supervivencia. Entre esa formación quiero destacar el curso ISAF (el mismo curso obligatorio para los participantes de la Barcelona Word Race), y conocimientos técnicos de los diferentes equipos de comunicación y salvamento de los que disponen estas embarcaciones. Adicionalmente también ha adquirido conocimientos sobre la actuación de los servicios de salvamento de diferentes países.
Este Ingeniero Naval y Oceánico formado en Ferrol actualmente realiza trabajos profesionales desde su oficina de A Coruña, a nivel nacional e internacional, entre los que cabe destacar trabajos realizados el año pasado en el astillero de NOBISKRUG (Alemania) como asesor de fragatas, atiende demandas de empresas líderes en España de tasaciones (como experto tasador) de buques, embarcaciones comerciales y de alta competición, mediciones de cascos, y colaboración técnica con diferentes oficinas técnicas y gabinetes de Ingeniería Naval (FBNAVAL, RAFAEL VELASCO INGENIERÍA NAVAL Y OCEÁNICA, INGEMAR, etc), elaboración de pequeños proyectos,…Hace unas semanas me encontré con él en el astillero de Navantia en Ferrol donde él estaba realizando un trabajo.
Moreno lleva trabajando y colaborando como medidor para la RFEV desde el año 2002, realizando diversas regatas a nivel nacional e internacional, como por ejemplo Copa del Rey, Trofeo S.A. la Reina, Campeonatos de España y Mundiales ORC, Vuelta al mundo Barcelona World Race….
La clase IMOCA es un organismo internacional de referencia, que se creó bajo el impulso de regatistas de monocascos de 60 y 50 pies, que tras una Vendée Globe 1996-1997 especialmente dura, sintieron la necesidad de crear una plataforma común y reglas que unieran a los regatistas y les permitieran progresar tanto en el terreno deportivo como en el campo de la seguridad. Por cuestiones de coherencia, la IMOCA se concentró en la clase reina, la de los monocascos open de 60 pies.
IMOCA se estructuró posteriormente hasta ser hoy el interlocutor de referencia ante los organizadores de las grandes regatas de altura, está reconocida actualmente ante la ISAF, el organismo internacional que coordina las actividades de vela en el mundo.
Los monocascos de 60 pies figuran entre los monocascos de regata modernos más rápidos. Construidos con materiales composites, están concebidos para ser a la vez tan ligeros como sea posible (mejora de velocidad) y suficientemente sólidos para resistir en las peores condiciones que puede imponer la navegación en alta mar.
El monocasco 60 pies Open nace realmente en 1986, con motivo de la segunda edición de la BOC Challenge, en la que cinco de los monocascos tienen en común la eslora (longitud) de 18,28 metros (60 pies). Ya en esa época los monocascos más recientes tienen las características de los barcos concebidas para las necesidades del momento: una gran manga (anchura) y una importante eslora de flotación.
Unos años más tarde, en 1998, se imponen las quillas basculantes destinadas a aumentar el par de adrizamiento y la informática adquiere cada vez más importancia para la recepción de las previsiones meteorológicas y la comunicación con tierra. Poco a poco, los pilotos automáticos, esenciales en la navegación en solitario, se van haciendo cada vez más inteligentes.
También evolucionan las carenas y los planos bélicos; los barcos incrementan su potencia, su popa se ensancha y mejoran en rumbos de ceñida. Por otra parte, destacan las bañeras cada vez más protegidas, y en algunos casos aparecen techos deslizantes que permiten proteger la zona de maniobra.
La exigencia de seguridad que la Clase impone tanto a los navegantes como a los arquitectos navales tiene mucho que ver con el éxito que vive ese barco. Desde el 2000, para poder participar en una regata, los barcos deben demostrar su capacidad de adrizarse sin ayuda exterior y garantizar la compartimentación interior y una flotabilidad importante en caso de vuelco o de vía de agua.
Con al menos veinte barcos en la salida de la Vendée Globe desde el año 2000, la IMOCA es actualmente la Clase oceánica más importante del mundo. La historia de la IMOCA y la de la Vendée Globe se confunden; y desde 2007 esa historia se comparte con la de la Barcelona World Race, regata de vuelta al mundo a dos. Hoy la IMOCA reúne a los mejores patrones solitarios y los mejores tándems que regatean en el mundo.
Volviendo a la regata del año pasado, la New York to Barcelona Race se convirtió en una regata emocionante. La flota mostró una gran igualdad y el combate se libró con todo tipo de condiciones meteorológicas, lo que brindó una magnífica oportunidad para probar barcos y equipos de cara a la Barcelona World Race, que tuvo su salida el pasado 31 de diciembre.
Finalmente, la regata de 2014 tuvo emoción desde el inicio. Cinco equipos se dieron cita en Manhattan para disputar las más de 3.700 millas náuticas que separan Nueva York y Barcelona a través del estrecho de Gibraltar. Los equipos estuvieron formados por Pepe Ribes (España) y Ryan Breymaier (EEUU), a bordo del Hugo Boss, Guillermo Altadill (España) y José Muñoz (Chile), con el Neutrogena, Anna Corbella (España) y Gerard Marín (España), a bordo del GAES, Marc Guillemot (Francia) y Morgan Lagravière (Francia,) con el Safran, y Nandor Fa (Hungría) y Marcell Goszleth (Hungría) con el Spirit of Hungary.
Según la Fundació Navegació Oceànica Barcelona 2014 la regata estuvo igualada hasta las Azores, donde los partes meteorológicos se mostraron confusos. El principal perjudicado por la incertidumbre fue el GAES de Anna Corbella y Gerard Marín que, después de haber hecho una brillante navegación, quedó algo descolgado de la lucha por el liderato. Pero hubo otro cambio cuando, en la aproximación a Gibraltar, Marc Guillemot, el copatrón del Safran, que con Morgan Lagravière navegaba líder de la flota, se lesionó las costillas en una caída, cuando maniobraba en la cubierta en condiciones muy duras de viento y mar. Safran arrumbó hacia Cádiz y Guillemot se sometió a una revisión médica que descartó gravedad en sus lesiones, aunque el gran regatista francés no pudo continuar. La pugna quedó entonces centrada en el Hugo Boss de Pepe Ribes y Ryan Breymaier y el Neutrogena de Guillermo Altadill y José Muñoz.
Ambos equipos protagonizaron luchas memorables en la aproximación a Gibraltar, en la siempre dura travesía del estrecho y a lo largo del recorrido hasta Barcelona. No fue hasta pocas millas antes de la línea de llegada, frente al Hotel W de Barcelona, cuando el Hugo Boss pudo cantar victoria.
La entrega de premios de la New York to Barcelona Race se efectuó el 20 de junio en el Real Club Náutico de Barcelona, que, junto con el New York Yacht Club, aportó el símbolo del hermanamiento deportivo entre ambas ciudades.
Volviendo a la Barcelona Word Race, la que partió el pasado 31 de diciembre de Barcelona, me gustaría incidir en que es una carrera todavía de actualidad, después de 93 días de competición. Precisamente ayer se completó el podium a las 1909 h, hora en que el GAES Centros Auditivos cruzaba la línea de llegada, coronándose como tercer clasificado de la regata. Guillermo Altadill y José Muñoz, segundos clasificados a bordo del Neutrogena, y Bernard Stamm, primer clasificado (llegó el 25 de marzo, después de 84 días de regata) junto a Jean Le Cam a bordo del Cheminées Poujoulat, recibieron en el pantalán a Anna Corbella y Gerard Marín, quienes navegaron sus últimas millas en el Mediterráneo con el spinnaker.
La bienvenida que vivieron en el Portal de la Pau Anna Corbella y Gerard Marín fue muy calurosa tras circunnavegar el globo a bordo del GAES Centros Auditivos en 91 días, 5 horas y 9 minutos y clasificarse en tercer lugar de la Barcelona World Race. Familiares, amigos y centenares de seguidores de la regata estallaron en aplausos cuando el IMOCA 60 apareció en el puerto de Barcelona. En la proa del barco, el dúo catalán encendió bengalas y se bañó con cava, feliz y emocionado.
Quiero destacar para finalizar que nuestro amigo Alfonso Valmaseda plasmó alguna foto de ese acontecimiento en su blog de regatas activas. Aquí un ejemplo:

¡Hasta la semana que viene!