Cinetosis ¿Por qué nos mareamos en los buques?

Después de la extensa noticia de la semana pasada, esta vez toca una noticia breve. Y se la dedico a mi hija preferida, Nerea, que hace poco tiempo me hizo la pregunta que encabeza esta noticia. El mareo que aparece en los viajes, y que tanto padecemos, también se denomina cinetosis y se define como la aparición de náuseas, vómitos y síntomas producidos por la aceleración y desaceleración lineal y angular de una manera repetida.

Puede aparecer en viajes por mar, aire, coche, tren y en atracciones.

cinetosis, ilustración de mareo en un buque
cinetosis, ilustración de mareo en un buque

La estimulación excesiva del aparato vestibular por el movimiento es la causa primaria. El cerebro siente el movimiento a través de las señales provenientes del oído interno, los ojos, los músculos y las articulaciones. Cuando recibe señales que no coinciden, puede surgir el mareo por movimiento.

 Por ejemplo, dentro de un barco, el oído interno percibe el movimiento, pero los ojos no pueden indicarle que se está moviendo. La susceptibilidad individual es muy variable. Los estímulos visuales (por ejemplo, un horizonte en movimiento), la mala ventilación (humos, monóxido de carbono, vapor) y los factores emocionales (por ejemplo, miedo, ansiedad) actúan junto con el movimiento para precipitar un ataque.

 Durante los preparativos de cierto día señalado de las Marinas de los EE. UU. y la británica Royal Navy, estas estaban buscando un fármaco alternativo a la peligrosa escopolamina (alcaloide de la planta del estramonio que evita el mareo, pero produce alucinaciones, dilatación de las pupilas y en dosis altas incluso la muerte), para prevenir el mareo de las unidades de desembarco. El mareo podía provocar vómitos y dejar en una situación muy desfavorable a quienes después tuvieran que poder apuntar con un arma, por ejemplo.

desembarco
desembarco

La solución les llegó por casualidad, en forma de dimenhidrinato, un antihistamínico contra los procesos alérgicos que se reveló también eficaz contra la pérdida de orientación y equilibrio, sudores fríos, náuseas y vómitos que se provocaba en muchas personas por efecto del movimiento de los barcos y otros medios de transporte. La cinetosis, que es su término médico, se produce cuando no cuadran las informaciones que llegan de la vista, el aparato ventricular del oído (una especie de acelerómetro como el que llevan los móviles, responsable del sentido de la posición y el equilibrio) y el sistema osteomuscular.

El oído y la cinetosis
El oído y la cinetosis

En 1952, el doctor Joan Uriach, un avispado médico catalán que había oído hablar del uso que se hacía del dimenhidrinato en Estados Unidos, empezó a comercializarlo en España, con pequeñas modificaciones, bajo el nombre de Biodramina. En la década de 1960, con el boom del Seat 600 y los utilitarios, se convirtió en un fármaco estrella: las carreteras, estrechas, con multitud de curvas y puertos de montaña, se llenaron de coches que olían a gasolina.

 Durante el verano, principalmente, son muchos los que deciden pasar el día de playa o vacaciones sobre un barco de recreo o velero. Y, entre todos los mitos y trucos que existen entre las leyendas urbanas voy a indicar una serie de consejos para evitar marearse en un barco, que surgen de mi propia experiencia. Normalmente estos mareos suceden en pequeños barcos, patrulleros, veleros o viajes en ferry, y no suelen darse tanto en barcos grandes o cruceros, pero, si padecemos o sufrimos de mareos, siempre es interesante seguir estos consejos.

Hombre mareado en un barco
Hombre mareado en un barco

¿Qué hacer cuando empezamos a marearnos?

Antes de sentirnos mal, cuándo notamos que empezamos a sentirnos raros, ante todo hay que impedir que falle el estómago. Mi experiencia es que todos los mareos empiezan por el estómago, por lo que se debe hacer todo lo posible por tenerlo lleno. Hay una leyenda urbana de intentar evitar líquidos, pero yo creo que es positivo tomar refrescos con azúcar (Coca-Cola, Fanta…). Eso sí, dejar de lado las bebidas alcohólicas, ya que estas acentuarán el mareo; y, lo principal… si empezamos a marearnos… ¡¡Comer una magdalena o manzana a bocados!! (Siempre hay que llevar manzanas verdes cuándo viajamos en barco). También es importante saber que cuanto más lleno tengamos el estómago menos probabilidad de mareo tendremos, por lo que los patrones siempre recomiendan comer hidratos de carbono, pastas, panes… para tener sensación de saciedad y estómago lleno y así no sufrir cinetosis.

¿Dónde ponernos para marearnos menos en un barco?

Lo ideal para reducir las posibilidades de mareos es ponernos en la parte delantera del barco, en la proa, y lo más arriba posible. ¿Por qué en la proa nos mareamos menos? Pues porque vemos el rumbo del barco, y quizá podamos seguir una trayectoria y esto nos permite encontrar el equilibrio. También favorece el viento o brisa que desde la proa nos dará en la cara y evitar calores y despejará… En la popa perdemos más el sentido de la orientación y esto acentúa el mareo. Aunque también es verdad que, en proa, a veces fijando la vista en un punto del horizonte, también se produce sensación de mareo.

Hombre con cinetosis en un barco
Hombre con cinetosis en un barco

¿Qué hacer con las angustias de los mareos?

Cuando comencemos con las angustias lo mejor es sentarnos y esperar a que nuestro cuerpo reaccione. O bien para vomitar o bien para asentar el estómago. Una manzana, agua fría y una bebida azucarada serán los mejores aliados en este momento. ¡¡Evitar bajar al baño del barco!! Cuando nos mareamos y tenemos ganas de vomitar no debemos bajar a los camarotes… el mareo puede multiplicarse notablemente.

Presionar las muñecas para el mareo.

Este es un truco muy antiguo que ha ido pasando desde los tiempos más antiguos de marineros en marineros. Se trata de hacer un garbanzo de papel enrollado y dejarlo presionado con nuestro reloj a la altura de las venas que vemos en la muñeca. Con la presión de la circulación de la sangre en las muñecas se mejoran los síntomas del mareo.

Respiraciones para el mareo.

Tanto antes como después de haber vomitado, las respiraciones son fundamentales para evitar y reducir los efectos del mareo. ¿Cómo respirar para no marearse? Pues lo mejor es coger grandes bocanadas de aire e ir expulsándolo muy poco a poco, de manera muy lenta y con un ritmo. Evitar las zonas de más calor del barco, dirigirse a zonas con sombras, aire acondicionado o brisa y, mirar siempre hacia el horizonte, lo ideal es 45º sobre el horizonte…

Y todo esto siguiendo la teoría psicológica sobre la cinetosis… Cuánto más pensemos que nos estamos mareado peor nos iremos encontrando. Si nos sugestionamos antes de subir al barco con los mareos… lo más probable es que nos mareemos. El movimiento de los barcos y la pérdida de referencias terrestres es lo que provocan esos tan famosos mareos de barco y que pueden convertir un día especial en una auténtica pesadilla desencadenada en sueño, vómitos, fríos y calores, dolores de estómago… Esperamos disfrutéis del verano, los consejos y las escapadas en barco. Y para aquellos que la navegación sea obligada, por cuestiones de trabajo, pues les va a ser más difícil el poder seguir estos consejos, ya que el trabajo a veces exige que no se pueda ir o estar, en el lugar más conveniente para evitar el mareo.

 

Raúl Villa Caro

En el año 1999 me licencié en Marina Civil (sección Náutica) en la Universidad del País Vasco. En 2001 obtuve el empleo de A.N. del Cuerpo General de la Armada y en 2005 la patente del Cuerpo de Ingenieros de la Armada. En el año 2001 obtengo el título de Ingeniero Técnico Naval (Estructuras Marinas) en la Universidad de A Coruña y posteriormente el título de Ingeniero Naval y Oceánico y el Diploma de Estudios Avanzados. En 2003 obtuve el título profesional de Capitán de la Marina Mercante. Desde Octubre de 2010 estoy contratado por parte de la UDC como profesor asociado. Actualmente además de realizar tareas de investigación en el Grupo Integrado de Ingeniería, y desde octubre 2010, imparto docencia en la Escuela Politécnica de Ingeniería de Ferrol (Grado y Máster en Ingeniería Naval y Oceánica), en el Master de PRL de la FCT, y en la Universidad Senior de Coruña. Mi actividad principal, y fuera de la UDC, se desarrolla en la Ingeniería de Construcciones de Buques (Arsenal de Ferrol) como Jefe de la Ingeniería de Plataforma. Desde abril de 2012 hasta diciembre de 2013 fui Secretario de la Delegación Territorial en Galicia del COLEGIO OFICIAL DE INGENIEROS NAVALES, y desde enero 2013 soy Secretario de EXPONAV (Fundación para el Fomento del Conocimiento de la Construcción Naval y de las Actividades Marítimas).En 2015 obtuve el título de Doctor por la Universidad de A Coruña. En 2021 fui nombrado Académico Correspondiente de la Academia de Ciencias y Artes Militares (ACAMI), y de la Real Academia de la Mar (RAM). Poseo más de 250 publicaciones repartidas entre artículos de Revistas, Libros, Capítulos de Libros, y Comunicaciones en Congresos.

3 Responses

  1. Yeison dice:

    A mí no me funciona nada, he intentado de todo, llevo 20 Barcos dónde he probado cada vez un consejo o técnica diferente y nada, termino vomitando el Barco, de 20 en los que le he subido 20 he vomitado, basta salir del muelle y que empiece a moverse para dejarles mi firma, he tomado la Bio con y sin cafeína y Ney, manzana, pera, pan, azúcar, jengibre, total que no se sabe. Como dice aquel Sabio Juan Ramón, lo más seguro que eso falle porque hay una falla.

  2. Santiago Canessa dice:

    Gracias Raul por la información técnica je! Uno lo sabe pero no sabía exactamente el porqué. Solamente que el oído intervenía, pero vista juega un rol muy importante.
    Personalmente no me mareo pero algunos viajeros sí.
    Gracias.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *