Al hablar de submarinos, sabemos que nos ocupamos de un buque que navega de modo autónomo en la superficie y bajo el agua. En el caso de los sumergibles, tienen alguna particularidad diferente como es la movilidad y autonomía limitada y que en la mayoría de los casos, funcionan conectados al buque nodriza, encargado de dirigirlo, suministrándole aire y electricidad. En el plano militar, los submarinos son buques muy útiles, por su dificultad en su localización y destrucción navegando en profundidad. Una característica que los diferencia de los buques  de superficie para evitar su detección, es el diseño de su propulsión y equipos. Dado que el sonido, se desplaza mucho mejor en el agua que en el aire; es la característica más fácilmente detectable.

Durante casi todo el siglo XX los submarinos usaban baterías eléctricas a la hora de navegar sumergidos. Los motores de combustión interna son para recarga de baterías y navegación en superficie. Hasta la llegada de la propulsión nuclear en los grandes submarinos, el medio de propulsión estándar era el diésel-eléctrico.